La infertilidad es la condición en que una persona, ya sea hombre o mujer, es incapaz de concebir. Esto debido a la imposibilidad para finalizar la gestación con el nacimiento de un niño sano.
Se suele considerar como infértil a una persona joven (menor a 30 años de edad), al no haber podido concebir luego de un año de mantener relaciones sexuales sin usar métodos anticonceptivos; o luego de 6 meses, en el caso de las personas mayores a 30 años. A esto se le conoce como infertilidad primaria.
Por otro lado, se le llama infertilidad secundaria cuando una pareja ha logrado un embarazo con anterioridad, pero son incapaces de volver a lograr un embarazo; o cuando se producen abortos después de haber logrado una gestación normal.
Hoy en día, este padecimiento sigue siendo motivo de muchos prejuicios culturales, que condicionan a las parejas que no pueden procrear y postergan la búsqueda de ayuda profesional. Sin embargo, es un problema más común de lo que se cree: 1 de cada 4 parejas llega a sufrir en algún momento problemas para tener hijos. En México, hay aproximadamente 1.5 millones de parejas que padecen infertilidad y menos del 50 % de éstas acude a un especialista, ya sea por temor o vergüenza, perdiendo así la oportunidad de encontrar un remedio o alternativa y poder tener un bebé.
Principales causas de infertilidad
La infertilidad puede ser ocasionada por numerosas razones tanto físicas como emocionales, tanto en el hombre como en la mujer, o en ambos. En la actualidad, aproximadamente 20 % de los mexicanos la padece.
Antes, el factor femenino era considerado el único importante en los casos de incapacidad para tener hijos. Actualmente, el 40 % de los casos en que una pareja no puede tener hijos se da por infertilidad en la mujer, de igual manera un 40 % en los hombres, y en un 20 % de los casos no es posible identificar una causa, lo que se denomina “esterilidad de origen desconocido.”
Causas de infertilidad en la mujer
La infertilidad femenina puede ser ocasionada por problemas físicos, emocionales, hormonales, genéticos e incluso por el estilo de vida o factores ambientales. La mayoría de los casos se producen por problemas en la ovulación. En ese sentido, una mujer no puede quedar embarazada cuando:
- El óvulo no puede ir del ovario hasta el útero.
- Una vez fecundado, el óvulo no se fija al revestimiento del útero.
- El óvulo no sobrevive una vez que se fija al útero.
- Los ovarios no pueden producir óvulos.
Estos problemas en la ovulación suelen ser provocados, en muchos casos, por algún tipo de cáncer o tumor, diabetes, miomas en el útero, quistes en los ovarios, alguna anomalía congénita o trastorno autoinmunitario, como el síndrome antifosfolipídico, que crea coágulos que tapan las arterias y puede, además de impedir el embarazo, provocar abortos espontáneos y preeclampsia.
Por otro lado, existen factores que pueden resolverse relativamente con mayor facilidad, al mejorar el estilo de vida que lleva una mujer, como disminuir el esfuerzo físico de una mujer que realiza ejercicio excesivamente, o llevar una dieta balanceada, pues muchas mujeres sufren de infertilidad por llevar una muy mala alimentación, debido a algún trastorno alimentario.
Otros factores que pueden afectar severamente la fertilidad, son el consumo de alcohol y tabaco, la obesidad y la edad avanzada: el punto de máxima fertilidad de una mujer está a comienzos de los 20 años de edad, la posibilidad de lograr un embarazo en parejas saludables menores de 30 años y que tengan relaciones con regularidad es de un 25 a un 30 % mensual. A partir de los 35 años el potencial reproductivo de la mujer disminuye considerablemente y, después de los 40 años, la posibilidad de quedar embarazada es menor al 10 %.
Causas de infertilidad en el hombre
Aún hace falta mucha investigación en este campo, pues en casi la mitad de los casos de infertilidad masculina no se logra identificar qué la ocasiona. Sin embargo, en los casos en que se logra determinar la causa, los principales factores de esterilidad son los trastornos de transporte de los espermatozoides (entre 10 y 20 %) y trastornos en los testículos (entre 30 y 40 %), y ocurre generalmente porque:
- Hay un número muy bajo de espermatozoides.
- Los espermatozoides son anormales o no funcionan adecuadamente.
- Un bloqueo impide que los espermatozoides sean liberados.
- Hay problemas con la eyaculación.
Se dice que un espermatozoide es anormal cuando éste es incapaz de desplazarse y llegar al óvulo, cuando no pueden introducirse en el óvulo o cuando, por malformaciones, no forman embriones sanos. Estos problemas pueden ser causados por: anomalías congénitas, tratamientos contra el cáncer, disfunción eréctil y eyaculación retrógrada, entre otros.
También, situaciones que parecen cotidianas pueden afectar severamente la fertilidad masculina, como la exposición a mucho calor por periodos prolongados, el consumo excesivo de alcohol y tabaco, el uso de drogas (como marihuana o cocaína), así como situaciones de sobrepeso y obesidad.
Prevención de la infertilidad
A pesar de que muchas parejas no pueden tener hijos por cuestiones imposibles de prever o evitar, es un error pensar que esto se deba siempre a una enfermedad grave o padecimiento irreversible; por el contrario, malos hábitos como fumar, beber en exceso, llevar un ritmo de vida muy acelerado y con mucho estrés, son los que generan muchos de los casos de infertilidad.
Mantener una dieta, peso y estilo de vida saludables aumentan en gran medida las probabilidades de quedar embarazada y tener un embarazo exitoso.
Tratamientos contra la infertilidad
Hoy en día, existen diversos tratamientos con los que una pareja puede lograr un embarazo y poder formar una familia. El tratamiento a seguir depende de cada pareja, de acuerdo a la causa de la infertilidad y puede consistir en:
- Educación y asesoría acerca del trastorno.
- Tratamientos para la fertilidad, como inseminación intrauterina (IIU) y fecundación in vitro (FIV).
- Medicinas para tratar infecciones y trastornos de coagulación.
- Medicinas que ayudan a la formación y liberación de óvulos de los ovarios.
Si tienes problemas para tener hijos, no dudes en buscar ayuda. Los pronósticos son favorables: más de la mitad de las parejas con infertilidad resultan embarazadas después de un tratamiento (esta cifra no contempla técnicas avanzadas como la fecundación in vitro).
Los prejuicios que prevalecen en torno al tema, muchas veces provocan que las parejas se sientas aisladas y frustradas. Pero no están solos, si tú y tu pareja tienen problemas para concebir, agenda una cita al: (993) 2 68 55 72. Ven a una consulta para tener un diagnóstico oportuno y buscar juntos la solución más adecuada para ustedes.